Controladores de Aerocivil desnudan caos en la entidad y aeropuertos tras renuncia de director Sergio París

Tras conocerse la renuncia de Sergio París a la dirección de la Aeronáutica Civil solicitada por el presidente Gustavo Petro al funcionario, los trabajadores de la entidad evidenciaron la difícil situación de la entidad, evidenciando de paso posibles riesgos en la seguridad aérea en los principales aeropuertos del país.

En carta dirigida al primer mandatario, la Asociación Colombiana de Controladores de Tránsito Aéreo, Acdecta, los funcionarios desnudaron la real situación de las terminales de transporte en Colombia.

“Nos dirigimos a ud como voceros y representantes del grupo de controladores de tránsito aéreo del país, ante la renuncia presentada por el actual director de la aeronáutica civil Dr Sergio París Mendoza.

Desconocemos si la misma fue aceptada, pero nos parece relevante indicarle que ya estábamos resignados a subsistir el periodo restante de esta administración en las precarias condiciones a las que viene siendo sometido y expuesto el servicio de control de tránsito aéreo, el cual tiene como objetivo principal brindar seguridad aérea a los usuarios garantizando que no se presenten colisiones entre aeronaves, manteniendo eficiencia operacional.

En la carta de renuncia publicada en diferentes medios de comunicación, observamos cómo se menciona un éxito administrativo digno de condecoración al exponer cifras y records de movimiento de pasajeros, así como robustecimiento de seguridad operacional gracias a su experiencia y conocimiento.

Es ahí donde los controladores debemos replicar, pues definitivamente hay dos ópticas que consideramos antípodas conceptuales entre lo que visualiza la administración a través de normas acomodadas, cuadros estadísticos, presentaciones, videos, fotos, informes, y lo que visualiza la operación en su día a día a través de sus expertos, en este caso controladores aéreos.

Contexto

Colombia al ocupar una posición geográfica privilegiada, es apetecida por operadores de todo el planeta, de tal manera que no puede ser sorpresa que continuamente sigan llegando aerolíneas con rutas nuevas, tal y como ha venido sucediendo en las últimas dos décadas.

El problema que venimos apreciando consiste en que se aprueban nuevas rutas sin verificar la capacidad de espacios aéreos en ciertas franjas horarias que vienen colapsadas de tiempo atrás generándose demoras en aire continuamente llegando aeronaves incluso a tener que cambiar de destino en la fase final del vuelo por las prolongadas esperas y gasto excesivo de combustible.

Igual sucede con las cifras que celebran, en donde hemos sido los controladores aéreos los
sacrificados a sostener un servicio que se hace insostenible en determinados horarios por colapso de espacios aéreos que hoy no cuentan con capacidad declarada siendo lo mínimo con lo que se debería contar como insumo para realizar una buena planificación operacional, organización y balance.

Fallas en infraestructura 

Hoy laboramos con una infraestructura degradada y escasez marcada de personal, en donde de manera hasta irresponsable se ha apreciado una política de maquillaje sobre esta incontrovertible realidad que finalmente venimos resolviendo los controladores aéreos con su exposición a pesar de la adversidad.

Señor presidente, los controladores aéreos somos personal licenciado con requisitos exigentes en cuanto a competencia, actitud, aptitud, y así en nuestra condición psicofísica en general, por lo que se hace absurdo siquiera pensar que desde puestos administrativos o desde perspectivas de autoridades aeronáuticas se cuestione lo que analiza, observa y escucha este personal público esencial, clasificado en alto riesgo laboral.

Algunas de las limitantes operacionales que actualmente padecemos, son generadas desde esta ineficiente administración, en donde tenemos como ejemplo el cómo las autoridades que fijan y auditan cumplimiento de normas, han tenido que recurrir a improvisar con múltiples dispensas, exenciones, memorandos, oficios etc que permitan omitir esta reglamentación, para poder atender el servicio público esencial que prestamos los controladores aéreos y así poder cumplir requisitos en las vigencias de las licencias de controladores ante la imposibilidad de cumplimiento.

Incluso de manera absurda se ha llegado a emitir conceptos indicando que una vigencia de “dos años”, según una nueva teoría de medida de tiempo, se puede interpretar como vigencia de 35 meses, atentando contra toda lógica y sentido común.

Saturación de espacios aéreos

Otro ejemplo está en la saturación de espacios aéreos; poco tiempo atrás, exponíamos que de tener un promedio de 50 sobrepasos o aproximaciones frustradas por mes en el Dorado, en un año pasamos a tener más de 100 mensuales, pero ante la denuncia propositiva de controladores aéreos licenciados, se nos respondió que estábamos dentro de parámetros reglamentados en normas internacionales, desconociendo que tenemos momentos en donde no hay espacio para una aeronave más en el aire y al presentarse estos sobrepasos masivos en estas franjas, pues tenemos que improvisar y resolver para encontrar un lugar estrecho en el aire donde acomodar estas aeronaves para garantizar su aterrizaje de manera segura.

Personal veterano

Teniendo marcada escasez de personal de transito aéreo, se ha recurrido a incorporar personal con edades superiores a 40 años, desconociendo parámetros recomendados por OACI, a sabiendas de que somos un personal con alto rendimiento mental, el cual sufre desgaste acumulado, y asimilar la exigencia de bases de alta complejidad a edades superiores definitivamente dificultará mantener eficiencia en las condiciones extremas que actualmente sostenemos los controladores.

Sin desconocer el nivel de compromiso, patriotismo, y entrega de personal de las fuerzas militares incorporado en Aerocivil, no se puede dejar de lado que hay una fuerza joven pujante dispuesta a brindar oxígeno, quienes claman por una oportunidad de empleo y si se revisa en detalle, actualmente hay un número significativo de personal con sueldo de retiro quitando esa primera oportunidad laboral a este personal desempleado e incluso quitándosela a personal de las mismas fuerzas militares que esperan oportunidad laboral y quienes no cuentan con esos sueldos de retiro, dejando incierto el panorama para afrontar su vejez y
futuro pensional.

Diera la impresión de que se acomodaron puestos a hormas específicas, ajustando manuales de funciones excluyentes, bajo supuestas exigencias de experiencia y capacitaciones, que se limitan a sencillamente gastar tiempo, buscar comisiones por todo el planeta y acumular títulos, pero al final mostrándonos desconexión con la realidad de la operación aérea colombiana, convirtiendo una entidad de carácter técnico en una entidad burocrática, en donde crecen las operaciones, crecen puestos de asesorías y contrataciones bajo figura de prestación de servicios de manera desorbitada, pero el cuerpo misional que sostiene esta operación sigue debilitándose y a nadie pareciera importarle. Las consecuencias de este descuido más temprano que tarde se harán visibles.

Fallas en equipos de aeropuertos

Exponemos un panorama minúsculo de dos elementos esenciales en la operación aérea que se encuentran fuera de servicio registrados en base de datos que proporciona la misma Aerocivil oficialmente, en donde se puede apreciar el deterioro en infraestructura al día 02 de marzo de 2025:

Los ADS B de Riohacha, Cartagena, Barranquilla, Montería, Leticia y Quibdó, se encuentran fuera de servicio.

Los ILS de Bucaramanga pista 35, Bogotá pista 14L, Cartagena pista 01, El Yopal pista 05, Montería pista 32, Quibdó pista 31, Cúcuta pista 16, se encuentran fuera de servicio.

No podemos dejar pasar por alto el estado de pistas con presencia de baches en: Arauca, Armenia, Bahía solano, Barrancabermeja, Bucaramanga, Guaymaral, Guapi, Leticia, Mitú, Neiva, Pasto, Pitalito, Popayán, Puerto Asís, Puerto Carreño, Riohacha, San Andres, Cúcuta, Mariquita, Santa Marta, Tolú, Villavicencio.

Señor presidente, aunque sabemos que por la complejidad de nuestras normas se dificulta entender la magnitud del problema facilitando la labor de ocultamiento de la realidad a quienes tienen interés en hacerlo, los controladores aéreos prestamos un servicio a todos los usuarios sin tener ninguna consideración por afinidad política, credo raza etc.

Aportes

Somos un personal altamente calificado y profesional para justamente bajo esas facultades técnicas que tenemos, realizar aportes de mejoras en pro de la seguridad aérea de todos los colombianos.

Nuestra eficiencia esta soportada en la sostenibilidad de la operación y altas cifras operacionales en donde definitivamente hemos encontrado situaciones de riesgo sobre las que se requiere urgentemente actuar y no ocultar.

No atacamos personas o gobiernos, solo pretendemos poder brindar seguridad aérea a los usuarios del transporte aéreo y realizar nuestra labor con garantías, no tenemos otra pretensión.

Así que valga la oportunidad para solicitarle revisar la continuidad de las actuales autoridades aeronáuticas y mandos medios en la Aerocivil, las cuales a nuestro juicio han brillado por su ausencia, incompetencia y negligencia”,’ puntualizaron los controladores aéreos en su comunicación.

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