Vuelve amenaza de paro del sector de transporte de carga si se aumenta el precio del diésel

La tensión crece entre Fedetranscarga y el Gobierno colombiano, a medida que se intensifica la disputa por el anunciado incremento de $8.000 en el precio del diésel. Henry Cárdenas, presidente de Fedetranscarga, no ha descartado la posibilidad de un paro nacional del transporte, un movimiento que podría paralizar la economía del país, si el Gobierno procede con el controvertido aumento.

Cárdenas expresó en W Radio su profunda preocupación y la de su sector por la propuesta gubernamental. “Nos preocupa mucho cuando le dicen a uno: le va a subir el doble de combustible de lo que lo tiene ahorita", lamentó Cárdenas.

La propuesta de aumento, que podría implementarse en febrero de 2024, ha sido recibida con alarmantes preocupaciones por parte de los transportadores, quienes afirman que el incremento del 30% en sus costos operativos haría que sus negocios se volvieran "completamente inviables".

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La desaprobación de la medida no se limita a los transportadores. En una reciente sesión plenaria del Senado de la República, los senadores escucharon los argumentos de los representantes del sector transporte, quienes articuladamente expusieron el impacto devastador que el aumento podría tener no solo en su industria, sino en la economía nacional.

A pesar de las persistentes negociaciones y conversaciones con el Gobierno del presidente Gustavo Petro, hasta ahora, no se ha alcanzado un terreno común. Los esfuerzos por cambiar la fórmula de precios del combustible han sido en vano. Sin embargo, se espera que las discusiones continúen la próxima semana.

El país, un notable productor de diésel, “produce el 80% de nuestro producto diésel”, argumentó Cárdenas, planteando preguntas sobre la necesidad de tal incremento. Propuso aumentar la capacidad de las refinerías existentes en Barrancabermeja y Cartagena como una alternativa viable, en lugar de someter a los transportadores y consumidores a precios inflados.

La preocupación se extiende más allá de los costos operativos. Cárdenas señaló que con el aumento, el diésel representará el 58% de los costos, una cifra insostenible para cualquier operador de transporte. "Nuestro trabajo prácticamente se iría en ACPM y no es viable para ningún transportador", enfatizó.

Con la economía aún recuperándose de los desafíos anteriores, la perspectiva de un paro nacional del transporte amenaza con empeorar la situación. Las miradas están puestas ahora en el Gobierno, mientras el país espera ansiosamente una resolución que no solo afronte las preocupaciones inmediatas de los transportadores sino que también asegure la estabilidad económica a largo plazo de la nación.

Mientras tanto, la amenaza de un paro se cierne ominosamente, recordando al país la delicada interdependencia entre los precios del combustible, el transporte y la salud económica de la nación. El diálogo entre Fedetranscarga y el Gobierno en las próximas semanas será crucial para determinar el futuro inmediato del transporte y la economía colombiana.

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