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Fiesta clandestina con más de 500 personas en casa que funciona como juzgado
Autoridades detectan venta de licor adulterado, con menores de edad en inmueble de Bogotá. Sirve además para el cuidado de adultos mayores.
En Bogotá, las autoridades descubrieron una fiesta con más de 500 personas en un inmueble que, en el día, funciona como juzgado de conocimiento.
La fiesta fue encontrada por el comando nocturno de la Secretaría de Seguridad de Bogotá y la Policía, en el barrio María Paz de la localidad de Kennedy.
Muchas de las personas en la fiesta eran menores de edad, y las autoridades descubrieron la venta de licor adulterado y sin permisos requeridos.
El sitio donde se realizaba la fiesta es un inmueble que también funciona como una fundación para adultos mayores. Las autoridades desalojaron el lugar y aplicarán las sanciones correspondientes.
El Secretario de Seguridad, Óscar Gómez Heredia, expresó que la integridad de los niños, niñas y adolescentes es una prioridad, y que no se debe jugar con sus vidas.
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En el mismo sector, en el barrio El Amparo, las autoridades encontraron dos establecimientos que se conectaban a través de una puerta falsa.
En uno de ellos, que funcionaba como bar, se incautaron más de 100 botellas de licor adulterado y de contrabando. En el otro establecimiento, un paga diario, se encontraron 30 personas en condiciones precarias de higiene y algunas indocumentadas.
La venta de licor adulterado es un problema creciente en Colombia. El consumo de este tipo de producto puede ser peligroso para la salud, ya que puede causar intoxicaciones y daños permanentes en el organismo.
La Policía Nacional ha establecido una línea directa para que los ciudadanos denuncien la venta de licor adulterado. También han realizado operativos en diferentes partes del país para desmantelar redes de venta de licor ilegal.
Autoridades han recordado la necesidad que los ciudadanos sean conscientes de los riesgos de consumir licor adulterado y que denuncien cualquier actividad ilegal relacionada con su venta.
Además, es fundamental que se respeten las normas y los permisos necesarios para la realización de eventos y actividades en lugares públicos y privados. La seguridad de los ciudadanos, especialmente de los más jóvenes, debe ser una prioridad para todos, resaltó la policía.
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