Gobierno de EE.UU. ofrece cinco millones de dólares por cabecillas del Tren de Aragua en Colombia

La Policía Nacional, en colaboración con el Gobierno de Estados Unidos, ha anunciado una recompensa de hasta 5 millones de dólares por información que contribuya a la detención de tres líderes de la organización conocida como Tren de Aragua. 

Las personas señaladas son conocidas por los alias de ‘Giovanny’, ‘Johan Petrica’ y ‘Niño Guerrero’. Este ofrecimiento se enmarca en los esfuerzos por combatir lo que se ha definido como crimen organizado transnacional, involucrando actividades delictivas tales como el tráfico de narcóticos, el tráfico de personas y el lavado de dinero.

La importancia de esta medida se ve reforzada por la reciente clasificación del Tren de Aragua como una significativa amenaza criminal transnacional. 

Según declaraciones de Brian Nelson, subsecretario de Terrorismo e Inteligencia Financiera, esta organización representa una creciente amenaza para las comunidades en Estados Unidos, lo que ha impulsado una respuesta coordinada para mitigar su impacto y alcanzar la captura de sus principales cabecillas.

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El origen del Tren de Aragua 

El Tren de Aragua es una extensa organización criminal de Venezuela, originada en el estado homónimo. Esta organización tiene su epicentro en la prisión de Tocorón y es encabezada por Héctor Guerrero Flores, conocido como "Niño Guerrero". 

Según las autoridades, esta megabanda, definida por contar con más de cien miembros activos, se ha expandido a al menos seis estados venezolanos y ha establecido presencia en naciones como Brasil, Colombia, Ecuador, Perú, Bolivia, Chile y los Estados Unidos, notándose un marcado aumento de sus operaciones internacionales desde 2020.

Originalmente, el grupo se formó a partir de un colectivo de trabajadores del sindicato de construcción ferroviaria en Aragua, quienes entre 2007 y 2010 se dedicaban a cobrar sobornos para asignar empleos en las obras, las cuales finalmente no se concretaron bajo el Plan Socialista Nacional de Desarrollo Ferroviario de 2006. 

Posteriormente, los integrantes de este colectivo se volcaron hacia actividades delictivas como la extorsión, secuestro, robo y homicidio. El Tren de Aragua ha sido identificado como responsable de numerosos actos de violencia, buscando ampliar su control sobre rutas de narcotráfico y contrabando.

Para 2018, la organización contaba con varios centenares de miembros en libertad y muchos más encarcelados, particularmente en la cárcel de Tocorón. 

La periodista venezolana Ronna Rísquez cuestiona estos inicios, atribuyéndolos al caos en las prisiones venezolanas y la emergencia de figuras conocidas como "pranes", líderes que coordinan las economías de las organizaciones criminales desde dentro de las cárceles. Rísquez indica que antes de la formalización de "Niño Guerrero" como líder, la banda estaba dirigida por José Gabriel Álvarez Rojas, alias "El Chino Pedrera", quien fue abatido en 2016. Este evento coincide con la consolidación de los "pranes" y su control de las prisiones.

Roberto Briceño-León, director del Observatorio Venezolano de Violencia, apunta a una decisión en 2005 del gobierno de Hugo Chávez, la cual entregó el control interno de las cárceles a los presidiarios, eliminando supervisión externa y asignando a los reclusos la responsabilidad de mantener el orden y evitar muertes, un plan que terminó en desastre. 

Rísquez estima que actualmente la banda podría contar con hasta 5.000 integrantes, habiendo crecido significativamente en 2019. La presencia y actividades del grupo se intensificaron durante y después de la gobernación de Tareck El Aissami en Aragua (2012-2017), y son conocidos por identificarse con ropa de colores negro o verde militar.

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