Operativo en cárcel El Pedregal deja 85 celulares incautados y golpe a red de extorsión

Un operativo sorpresa realizado en la cárcel El Pedregal de Medellín permitió a las autoridades afectar una estructura criminal que operaba desde el interior del establecimiento penitenciario y que estaría dedicada a la extorsión y al tráfico de estupefacientes.

La intervención fue adelantada de manera conjunta por la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá y la Fiscalía General de la Nación, con apoyo de unidades especializadas del Gaula, tras recibir información ciudadana sobre la existencia de espacios acondicionados para ocultar elementos prohibidos.

Con base en esos datos, los uniformados ingresaron a uno de los patios del penal, donde permanecen recluidas 712 personas, varias de ellas con antecedentes de pertenecer a grupos armados organizados y estructuras delincuenciales. Durante la diligencia se realizaron registros detallados en celdas, corredores, áreas comunes y zonas de difícil acceso.

Como resultado de las requisas, las autoridades ubicaron un punto de acopio clandestino que, según las investigaciones, funcionaba como soporte logístico para la comisión de diferentes delitos, entre ellos la extorsión telefónica con víctimas en distintas regiones del país.

El comandante de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, general William Castaño, informó que el operativo dejó la incautación de 85 teléfonos celulares, 30 cargadores, 10 armas cortopunzantes y varias sustancias ilícitas. Entre lo decomisado se encontraron más de 4.000 gramos de marihuana, 1.100 gramos de base de coca y 180 gramos de tusi.

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De acuerdo con las autoridades, los dispositivos móviles eran utilizados para coordinar una red de extorsión de alcance nacional, mediante llamadas en las que se suplantaban autoridades o se ejercía intimidación directa para exigir consignaciones y transferencias de dinero. De forma paralela, la estructura mantenía una organización interna para el expendio y la circulación de drogas dentro del penal.

Los teléfonos incautados serán sometidos a análisis técnico y forense para identificar contactos, registros de comunicación y posibles vínculos con hechos delictivos denunciados en diferentes ciudades del país. Ese material, señalaron los investigadores, será clave para avanzar en los procesos judiciales contra los responsables y para establecer cómo ingresaron los elementos prohibidos al centro de reclusión.

El operativo en El Pedregal se suma a otras intervenciones recientes en cárceles del Valle de Aburrá, como la realizada días atrás en Bellavista, donde también fue desmantelado un centro de llamadas ilegal. Desde la Policía reiteraron que continuarán los controles y requisas en establecimientos penitenciarios para reducir la capacidad criminal que se ejerce desde su interior.

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