Ataque en manada en Bogotá deja a un hombre en UCI: le robaron el celular y lo hirieron con machete

Bogotá vive una nueva ola de indignación tras el brutal ataque sufrido por un ciudadano en la localidad de Bosa, donde fue agredido por una banda de delincuentes que lo persiguieron, apedrearon y golpearon con un machete para robarle su teléfono celular y otras pertenencias. 

La víctima, identificada como Brayan, logró llegar ensangrentado a la portería de su conjunto residencial, pero no fue auxiliado por los vigilantes, quienes alegaron no reconocerlo debido a la gravedad de sus heridas.

“Venía huyendo, lo hirieron con machete y no le abrieron la puerta”, relató entre lágrimas su madre en diálogo con BLU Radio. Brayan recibió heridas en su rostro y una de sus manos, y actualmente se encuentra en cuidados intensivos en el hospital de Bosa, a la espera de una cirugía reconstructiva.

Los residentes del sector y los familiares del joven cuestionaron la actuación de los guardas de seguridad, quienes según testigos, ignoraron sus llamados de ayuda pese a que dio su nombre y número de apartamento. “No puede ser que no lo hayan reconocido. Si lo hubieran dejado entrar, quizás todo esto se habría evitado”, lamentó la madre de la víctima.

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La Policía logró retener a dos de los presuntos agresores, pero fueron liberados horas después por la ausencia de una denuncia formal. Este hecho ha reabierto el debate sobre la eficacia del sistema judicial y la necesidad de mejorar los canales de denuncia para evitar que los delincuentes queden en libertad.

La familia de Brayan, mientras tanto, espera justicia. “Que esto no quede en la impunidad. No solo le robaron, lo dejaron al borde de la muerte”, concluyó su madre.

Otro ataque similar en Puente Aranda

La misma noche, en el barrio La Camelia de la localidad de Puente Aranda, otro ciudadano fue víctima de un ataque similar. Cinco delincuentes lo rodearon, lo golpearon brutalmente y le robaron el celular. Las cámaras de seguridad registraron el violento asalto, y la víctima fue trasladada a un centro asistencial.

Los habitantes del sector denuncian que este tipo de ataques son cada vez más frecuentes. “Aquí todos los días están robando. Esto se volvió tierra de nadie”, denunció un comerciante, quien prefirió mantener el anonimato por temor a represalias.

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