Presidente de Sanitas ratifica la crisis financiera del sector

El presidente de Sanitas, Juan Pablo Rueda, rompió el silencio y advierte sobre la inminente crisis financiera que afecta a tres de las principales Entidades Promotoras de Salud (EPS) del país. Esta situación, según el directivo, se debe a una "desfinanciación progresiva" y a la aparente negativa del Gobierno a reconocer la gravedad del problema.

El 27 de julio, en una carta dirigida al Ministro de Salud, Guillermo Alfonso Jaramillo, los presidentes de las EPS Sura, Sanitas y Compensar expresaron su preocupación sobre la sostenibilidad financiera de sus operaciones más allá de septiembre. En ella, destacaban la potencial interrupción en la atención de más de 13 millones de colombianos si no se adoptaban medidas inmediatas.

"Es nuestra intención y responsabilidad evidenciar la precaria situación financiera que enfrenta nuestro sistema de salud y la creciente preocupación sobre la viabilidad de nuestras EPS, comprometidas con el bienestar de la población", declaraban en la carta.

Sin embargo, el 22 de agosto, el Ministro Jaramillo refutó las afirmaciones, sosteniendo que "No hablemos de crisis donde no las hay". A su vez, el Presidente Gustavo Petro respaldó esta posición, negando la existencia del problema financiero mencionado.

En Caracol Radio, Rueda fue enfático al manifestar que "desde hace más de un año, los ingresos que las EPS reciben del Gobierno no cubren los costos asociados a la atención en salud". A pesar de los desafíos, Rueda aseguró que las tres EPS continúan atendiendo y cumpliendo con sus compromisos con la red de prestadores de salud.

Respecto a las soluciones, el presidente de Sanitas mencionó la necesidad de "refinanciar y reequilibrar el sistema" como una medida urgente para evitar el colapso de las EPS. También hizo hincapié en que, aunque este desfinanciamiento no es exclusivo del actual gobierno, es imperativo que la administración actual tome medidas correctivas.

Rueda concluyó con una perspectiva sombría, advirtiendo que de no resolverse la situación, las EPS podrían enfrentar dificultades para cumplir con sus obligaciones, impactando eventualmente en la atención de los usuarios.

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