Comienzan negociaciones del salario mínimo: aumento sería del 12%

En el Ministerio del Trabajo de Colombia, se convocó a una reunión crucial este martes para debatir el incremento del salario mínimo de 2024. Este evento marca el inicio de un proceso significativo que involucra a representantes gubernamentales, empresariales y de las centrales obreras. El objetivo principal de este encuentro es determinar el porcentaje de aumento del salario mínimo.

El Ministerio del Trabajo ha delineado cuatro puntos claves para la reunión: la reactivación de las discusiones sobre empleo y empleabilidad, el fomento del diálogo social, avanzar en la ratificación del convenio 190 con la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que aborda la violencia y el acoso laboral, y definir el calendario para la negociación del salario mínimo junto a empresarios y trabajadores.

Un elemento técnico fundamental en estas negociaciones es la consideración de la inflación actual y la evolución de la productividad. El Gobierno anticipa un aumento significativo en dos cifras, proyectando una inflación que oscilaría entre el 9% y el 10% para el 2023.

Bancolombia, por su parte, ha hecho una predicción de un aumento del 12%, lo que elevaría el salario mínimo a alrededor de $1.300.000. Este ajuste busca equilibrar la recuperación del poder adquisitivo de los hogares y aliviar los efectos secundarios de la inflación. 

El equipo de Estudios Económicos de Bancolombia enfatiza que este aumento tendría repercusiones directas en las finanzas públicas, especialmente en lo referente a la nómina salarial del Estado, en un contexto de incertidumbre fiscal para 2024.

Jaime Alberto Cabal, presidente de Fenalco, ha intervenido en el debate, solicitando a la Comisión VII de la Cámara de Representantes posponer la discusión sobre la reforma laboral, argumentando que es inadecuado e inoportuno abordarla simultáneamente con la negociación del salario mínimo. 

Destaca que los empresarios enfrentan desafíos considerables, como impuestos elevados, contracción económica, altas tasas de interés y creciente inflación, además del aumento en los costos de combustibles y peajes. Esta situación, según Cabal, podría afectar la viabilidad de numerosas empresas y, por ende, la generación de empleo formal en el país.

El incremento anterior del salario mínimo en 2023 fue del 16%, un dato relevante en el contexto de las negociaciones actuales.

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