Tribunal anula sanciones de la Contraloría por supuesto detrimento en Reficar

Tres años después de que la Contraloría General de la República sancionara a varios exdirectivos de Reficar por un presunto detrimento patrimonial de $2.9 billones, el Tribunal Administrativo de Cundinamarca anuló gran parte de esa decisión. 

Según el fallo de primera instancia, la modernización de la refinería no generó pérdidas para el Estado, cuestionando la base de las acusaciones del ente de control.

La resolución, liderada por el magistrado Felipe Solarte, favoreció a Hernando José Gómez, exmiembro de la junta directiva de Reficar, quien demandó a la Contraloría. La defensa de Gómez argumentó que los aumentos presupuestarios, que llevaron el proyecto de US$3.777 millones a US$8.016 millones, fueron legales y necesarios para el avance técnico del proyecto.

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El Tribunal señaló que los cálculos y pruebas de la Contraloría no demostraban acciones indebidas por parte de la junta directiva. Además, destacó que las adiciones presupuestarias evitaron la paralización del proyecto y garantizaron su culminación. Actualmente, Reficar es considerada una de las empresas más valiosas del país.

Entre los hallazgos del Tribunal se incluye la conclusión de que no existió dolo ni culpa grave en las decisiones de los directivos. Las críticas de la Contraloría sobre supuestos gastos no relacionados con el proyecto, baja productividad y demoras fueron desestimadas por falta de pruebas sólidas.

Este fallo marca un giro en el caso Reficar y plantea cuestionamientos sobre los procedimientos de la Contraloría en sanciones históricas como esta. Aunque la decisión puede ser apelada, establece un precedente sobre la evaluación de proyectos de infraestructura de gran escala en el país.

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