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Un soldado muerto y otro herido en nuevo ataque armado en Antioquia

La ofensiva, atribuida al Clan del Golfo, ocurrió el 3 de mayo y cobró la vida del soldado Alejandro José Bejarano González, quien prestaba servicio militar en el occidente antioqueño.

 Alejandro José Bejarano González
Por Agencia Periodismo Investigativo | Dom, 04/05/2025 - 09:48 Créditos: Imagen tomada de Ejército Nacional

Un nuevo hecho violento golpeó a la Fuerza Pública en el occidente de Antioquia. En horas de la tarde del sábado 3 de mayo, un grupo de soldados que realizaba labores de patrullaje en zona rural del municipio de Frontino fue víctima de un ataque armado, presuntamente perpetrado por integrantes del Clan del Golfo.

La acción criminal dejó como saldo la muerte del soldado Alejandro José Bejarano González, oriundo de Quibdó, Chocó, quien se encontraba prestando su servicio militar en el Batallón de Infantería N.º 32 Pedro Justo Berrío, adscrito a la Cuarta Brigada del Ejército Nacional. En el mismo hecho, otro uniformado resultó herido y fue trasladado a un centro médico, donde recibe atención especializada.

Según información preliminar, el hostigamiento fue ejecutado mientras las tropas desarrollaban labores de control territorial en una zona con fuerte presencia de grupos armados ilegales. Las autoridades atribuyen el ataque al Clan del Golfo, una de las estructuras criminales más activas y violentas del país.

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El Comando del Ejército Nacional rechazó contundentemente esta nueva agresión y expresó su solidaridad con los familiares del soldado fallecido, así como su compromiso con la recuperación del militar herido. También reafirmó que continuará realizando operaciones para proteger a la población civil y mantener la seguridad en la región.

Este ataque se suma a una ola de violencia que afecta a Antioquia desde hace dos semanas, como parte de un denominado “plan pistola” atribuido al Clan del Golfo, el cual ha dejado un saldo de ocho uniformados y un civil muertos. Como medida preventiva, varios municipios del departamento han decretado toque de queda y restricciones al parrillero en motocicleta, buscando frenar los asesinatos selectivos y mejorar la seguridad en las zonas más afectadas.

Las autoridades continúan desplegando operativos militares y policiales para contener la expansión de estos grupos criminales y restablecer el orden en las comunidades rurales más golpeadas por la violencia.

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