Encuesta de la Andi revela que uno de cada tres empresarios sufre impactos por la inseguridad

Una proporción significativa del empresariado colombiano advierte sobre el deterioro de las condiciones operativas debido al incremento de situaciones asociadas a la inseguridad y los bloqueos en vías del país.

Así lo revela la más reciente edición de la Encuesta de Opinión Industrial Conjunta (EOIC), elaborada por la Asociación Nacional de Empresarios de Colombia (Andi), con participación de Acicam, Acoplásticos, Andigraf y Camacol, la cual registra un aumento sustancial en el número de empresas afectadas por este tipo de eventos.

El estudio, correspondiente al primer cuatrimestre de 2025, señala que el 32 % de las compañías encuestadas reporta haber experimentado afectaciones derivadas de la inseguridad, cifra que representa un incremento de nueve puntos porcentuales frente al resultado registrado en 2024, cuando el porcentaje fue de 23 %.

Esta situación ha sido identificada por los gremios como un obstáculo que incide de manera directa en el normal desarrollo de las actividades productivas.

El presidente de la Andi, Bruce Mac Master, manifestó que el entorno de inseguridad vigente genera un grado considerable de incertidumbre para el sector privado, lo que repercute en la toma de decisiones estratégicas, especialmente aquellas relacionadas con la inversión y la generación de empleo.

De acuerdo con el dirigente gremial, varios sectores enfrentan afectaciones diarias que han impedido su recuperación económica, situación que, según sus palabras, se ha agudizado con el paso del tiempo.

La encuesta indica que los bloqueos de vías se constituyen en la principal causa de perturbación reportada por las empresas. El 76,6 % de los encuestados afirma haber sido afectado por este fenómeno.

Le siguen la imposibilidad de acceder a determinadas zonas del país (47,7 %), las restricciones para el transporte de mercancías (35,2 %), y hechos como atracos (18,8 %), actos de vandalismo (15,6 %), robos internos (13,3 %) y piratería terrestre (12,5 %). También figuran delitos como ciberdelitos (9,4 %), extorsiones (4,7 %), presencia de microtráfico (1,6 %) y casos de secuestro (1,6 %).

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Estas situaciones han conllevado consecuencias económicas que se reflejan en distintos frentes. Un 64,6 % de las empresas encuestadas reporta aumento en los costos de fletes; el 37 % ha destinado mayores recursos a servicios de seguridad privada; el 36,2 % ha evidenciado un alza en los seguros contratados; y el 35,4 % registra una reducción en sus niveles de ventas.

Con relación a las pérdidas económicas atribuidas a los bloqueos, el 24 % de las compañías estima que oscilan entre los 50 y los 200 millones de pesos, mientras que un 6 % afirma haber sufrido impactos superiores a los 500 millones de pesos. Además, el 29 % indica que entre el 1 % y el 5 % de su facturación anual se ha visto comprometida como consecuencia de las interrupciones viales o las movilizaciones.

Entre las principales consecuencias operativas se identifican demoras en la entrega de productos (51 %), incrementos en los costos logísticos (34 %) y, en menor medida, cancelación de pedidos o pérdida de clientes (1 %). Las estrategias adoptadas por las empresas para mitigar estos impactos incluyen el cambio de rutas o proveedores de transporte (45 %), ajustes en los niveles de inventario o aumento de la capacidad de almacenamiento (27 %), coordinación con autoridades o gremios (11 %) y la implementación de otras medidas específicas (4 %). No obstante, un 28 % de las empresas consultadas afirma no haber adoptado ninguna acción ante el panorama descrito.

En términos de desempeño económico, la EOIC registra un crecimiento moderado en los primeros cuatro meses del año. La producción industrial creció 0,5 % y las ventas totales lo hicieron en 1,2 %, mientras que las ventas en el mercado interno aumentaron en 1,0 %.

La utilización de la capacidad instalada alcanzó el 79,2 %, lo que representa una leve mejora en comparación con periodos anteriores. Sin embargo, se reporta una acumulación de inventarios: el 29,1 % de las empresas los considera altos, frente al 10,9 % reportado en abril del año anterior.

La percepción empresarial frente al clima general de negocios no muestra señales concluyentes de mejoría. Aunque el 58,2 % de los encuestados califica como buena la situación actual de su empresa, solo el 35,2 % proyecta una mejora en el mediano plazo, lo que refleja una expectativa contenida ante las condiciones actuales de orden público y logística en el país.

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