Estados Unidos pide a Israel protección a civiles tras genocidio en Gaza

En una declaración oficial emitida el lunes, el gobierno de Estados Unidos expresó su posición respecto a los crecientes conflictos en la Franja de Gaza, negando la existencia de un "genocidio" en el territorio. Sin embargo, instó al gobierno israelí a intensificar sus esfuerzos para garantizar la seguridad y protección de los civiles afectados por el conflicto.

Jake Sullivan, asesor de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, manifestó en una conferencia de prensa que, aunque no consideran que los actos de violencia en Gaza constituyan un genocidio, es imperativo que Israel adopte medidas adicionales para proteger a los civiles inocentes atrapados en el fuego cruzado. "Israel puede y debe hacer más para asegurar la protección y el bienestar de los civiles inocentes", afirmó Sullivan.

El asesor también se refirió específicamente a la situación en Rafah, un área densamente poblada en el extremo sur de la Franja de Gaza, adyacente a la frontera con Egipto. 

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Sullivan advirtió contra la realización de operaciones militares a gran escala en esta zona, subrayando el alto riesgo que tales acciones representarían para la población civil. "Creemos que sería un error lanzar una operación militar a gran escala en el corazón de la zona, lo que pondría en riesgo a un enorme número de civiles", destacó.

A la fecha, las acciones militares en Rafah han sido descritas por el gobierno estadounidense como de "alcance limitado", distinguiéndolas de una invasión a gran escala, la cual ha sido motivo de preocupación constante.

Desde el inicio del conflicto el 7 de octubre, la escalada de violencia ha tenido un costo humano devastador. La Agencia de la ONU para los Refugiados Palestinos (UNRWA) informa que unas 360,000 personas han sido desplazadas en Rafah desde que se emitiera la primera orden de evacuación hace una semana. 

Además, el número de víctimas fatales ha ascendido a más de 35,000, en su mayoría mujeres y niños, con casi 79,000 heridos y alrededor de 10,000 personas desaparecidas, presumiblemente atrapadas bajo los escombros de estructuras colapsadas debido a los bombardeos.

Este anuncio se produce en un contexto de creciente tensión internacional y llamados globales para una solución pacífica que proteja la vida de los inocentes y busque un cese al fuego duradero en la región.

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