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Proyecto de ley de inmigración de Reino Unido calificada como inhumana por la ONU
Detalles de una iniciativa que causa controversia a nivel mundial.
El controvertido Proyecto de Ley de Migración del Reino Unido, objeto de intensos debates y condena tanto en el ámbito nacional como internacional, está en proceso de convertirse en ley, a pesar de la condena de la Onu.
La medida, que según Naciones Unidas viola las obligaciones del país bajo el derecho internacional, ha sido aprobada por el Parlamento y espera ahora la aprobación real del rey Carlos III.
La ley, que está siendo tildada de inhumana por políticos, juristas y grupos de derechos civiles, tiene como objetivo frenar la llegada de miles de migrantes y refugiados. Se considera que choca frontalmente con las leyes internacionales de derechos humanos y refugiados. Los altos funcionarios de la ONU en materia de derechos humanos y refugiados han expresado su preocupación por las profundas consecuencias que esta ley tendrá para las personas que buscan protección internacional.
La propuesta emblemática del gobierno conservador en el poder evitará que la mayoría de las personas soliciten asilo en el Reino Unido sin previo permiso y las deportará a su país de origen o a una tercera nación considerada segura, como Ruanda.
El proyecto ha encontrado resistencia y ha sido objeto de múltiples alteraciones en la Cámara de los Lores, la cámara alta no electa de Gran Bretaña. Esta ha tratado de suavizar la ley a través de diversas enmiendas, incluyendo la demanda de detenciones más cortas para niños no acompañados, mayores protecciones para las víctimas de esclavitud moderna y retrasos de seis meses en las deportaciones de migrantes. Sin embargo, todas estas propuestas han sido derrotadas, destacó Al Jazeera.
Volker Turk, el jefe de derechos humanos de las Naciones Unidas, ha expresado su preocupación por la aprobación del proyecto de ley, calificándola de "muy preocupante" y advirtiendo que podría establecer un precedente perjudicial para el desmantelamiento de las obligaciones de asilo que otros países podrían seguir.
Es importante señalar que es improbable que las deportaciones a Ruanda comiencen hasta el próximo año, a la espera de un fallo de la Corte Suprema sobre su legalidad. Gran Bretaña ha pactado un acuerdo inicial de 140 millones de libras (180 millones de dólares) con el país africano, pero la política ha estado enredada en litigios judiciales.
En un desarrollo relacionado, una barcaza para alojar a inmigrantes y refugiados llegó a la costa sur de Inglaterra el mismo martes que el proyecto de ley fue aprobado. El gobierno ha defendido el uso de estas embarcaciones, insistiendo en que son una alternativa más económica a los hoteles.
El año pasado, un récord de 45.755 personas llegaron a Gran Bretaña en pequeñas embarcaciones a través del Canal de la Mancha, principalmente desde Francia. Este año, ya han llegado más de 12.000, un ritmo similar al de 2022. Este aumento pone de relieve la creciente tensión en torno a la cuestión migratoria y la presión adicional que la nueva ley ejercerá sobre aquellos que buscan refugio en el Reino Unido.
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