Abren investigación por concusión contra el congresista David Racero

El panorama judicial del congresista David Racero se complica. Aunque ya afronta tres procesos de pérdida de investidura en el Consejo de Estado, la situación más delicada es la investigación formal que la Sala de Instrucción de la Corte Suprema de Justicia abrió en su contra por el delito de concusión.

De acuerdo con el reporte Coronell de W Radio, la Corte indaga si Racero utilizó a miembros de su Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) para cubrir gastos personales, incluidos pagos de tarjetas de crédito, giros a familiares —entre ellos su padre— y hasta compras del mercado de su casa.

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El delito de concusión se configura cuando un servidor público abusa de su cargo para exigir o solicitar, de manera indebida, dinero, valores o cualquier otro beneficio. En este caso, la hipótesis es que Racero habría recibido parte de los ingresos de sus subalternos.

El congresista ha defendido su inocencia alegando que los pagos correspondían a devoluciones de préstamos que él mismo realizaba a sus empleados. Sin embargo, según Coronell, la trazabilidad de los giros no confirma esa versión y, por el contrario, algunos testimonios de miembros de la UTL presentan inconsistencias, incluido el de Jhon Leonardo García.

Mientras insiste en que no ha cometido irregularidades, Racero espera que en los próximos días se definan las decisiones judiciales en los procesos que lo tienen bajo la lupa de la justicia y que podrían poner en riesgo sus aspiraciones de llegar al Senado.

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