Expresidente de la CUT considera de improvisado el nuevo modelo de salud de los docentes

Tras arduas negociaciones con el Ministerio de Educación, la Federación Colombiana de Educadores (Fecode) logró alcanzar un acuerdo con el Gobierno nacional para poner en marcha un nuevo sistema de salud destinado a los profesores del Magisterio y sus familias desde el pasado 1 de mayo. Sin embargo, apenas una semana después de su implementación, este sistema ha enfrentado diversas críticas y fallas que han generado preocupación entre los docentes.

El expresidente de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT), Diógenes Orjuela, ha sido uno de los principales críticos del proceso. Orjuela destacó que las fallas en el sistema de salud estaban directamente relacionadas con una transición precipitada y llena de improvisaciones por parte del Gobierno. Según él, el Gobierno no tuvo una visión clara sobre la implementación del nuevo servicio y no escuchó las advertencias de Fecode y otros actores involucrados.

Orjuela explicó que al hacer la transición se necesitaban aproximadamente entre 10 mil y 11 mil contratos, proceso que en sus palabras debía ser largo y que "no se iba a poder hacer en un mes".

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"Aquí había que contratar absolutamente todo para todos los usuarios en 30 días y eso era absolutamente imposible; por eso, fue incorrecto haberlo asumido de esa manera, y también fue incorrecto haberle prometido al Magisterio que podían ir a donde quisieran", dijo el expresidente de la CUT.

La presión ejercida por los tres representantes del Gobierno en el consejo del Fondo Nacional de Prestaciones Sociales del Magisterio (Fomag) habría sido un factor determinante en la decisión de implementar rápidamente el nuevo sistema de salud. Esto ha generado malestar entre los sindicatos y expertos en el campo educativo, quienes critican la falta de diálogo y la falta de consideración hacia las preocupaciones expresadas.

"El afán siempre era de los tres representantes del Gobierno", expresó Orjuela.

Fecode insistió en la necesidad de una transición que garantizara un buen servicio de salud para los docentes, pero consideró que la rapidez en la implementación del nuevo sistema comprometió la calidad y efectividad del servicio. Ante este panorama, los docentes expresan su preocupación por el futuro del sistema de salud y exigen una solución rápida y efectiva por parte del Gobierno.

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