Cerca de 2.65 millones de personas viven con algún tipo de discapacidad en Colombia

Cada 3 de diciembre se conmemora el Día Internacional de las Personas con Discapacidad, una fecha que invita a reflexionar sobre los derechos y el bienestar de esta población en todos los aspectos de la vida. En Colombia, según el DANE, cerca de 2,65 millones de personas viven con algún tipo de discapacidad, de las cuales el 54,6% son mujeres y el 45,4% hombres. 

Aunque la Ley 1618 de 2013 establece garantías para la inclusión social, persisten barreras que limitan la plena participación de esta población en áreas como la educación, la salud y el trabajo. Durante el I Congreso Internacional en Rehabilitación Integral, Inclusión y Calidad de Vida, organizado por el Politécnico Grancolombiano y la Fundación Surcos, se discutieron los avances y desafíos que enfrenta el país.

En el ámbito educativo, la licenciada María Cristina Tavera, directora de Asdown Colombia, explicó que, aunque el acceso a la educación ha mejorado, las barreras culturales y metodológicas continúan siendo un obstáculo. Estas incluyen enfoques tradicionales y clínicos que perpetúan la exclusión, así como la barrera actitudinal, reflejada en el miedo y rechazo hacia las personas con discapacidad. 

Según Tavera, el enfoque de derechos debe prevalecer, pues en él las barreras están en la sociedad y no en la persona, lo que exige superar el rechazo y el temor que impiden una educación inclusiva. Por su parte, en el acceso a la salud, el médico fisiatra Fabián Barragán resaltó los desafíos en los servicios, donde los largos tiempos de espera para acceder a especialidades como fisiatría retrasan los tratamientos y afectan la calidad de vida. Subrayó que la rehabilitación debe ser personalizada, basada en las necesidades del paciente y no en rutinas genéricas, destacando que la inclusión en salud va más allá de eliminar barreras físicas e implica construir sistemas de apoyo efectivos.

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En el ámbito laboral, el profesor Erik Rico destacó la importancia de la neurodiversidad, una propuesta que valora las habilidades únicas de personas con diferencias cognitivas. Sin embargo, persisten barreras relacionadas con perfiles de cargo tradicionales y el desconocimiento sobre las capacidades de esta población. 

Yesica Espinosa, docente de Derecho, mencionó los incentivos fiscales para empresas que contraten personas con discapacidad como un paso hacia la inclusión, mientras que Carolina Jurado, directora de Experiencia e Inclusión, señaló que el desconocimiento sigue siendo el mayor obstáculo. Según Jurado, es fundamental construir una cultura de diversidad e inclusión dentro de las organizaciones, donde se reconozca el valor del capital humano diverso.

A pesar de los avances en legislación y teoría, Colombia enfrenta retos significativos para lograr una verdadera inclusión. Las barreras actitudinales, culturales y metodológicas continúan limitando el desarrollo de las personas con discapacidad en todos los ámbitos. En este Día Internacional de las Personas con Discapacidad, el país tiene la oportunidad de redoblar esfuerzos para garantizar una sociedad más equitativa y accesible.

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