Empresa de transporte demanda a Chicago por traslado de migrantes a varios estados

Una empresa de transporte de Texas ha decidido llevar a la ciudad de Chicago ante la justicia federal. Esta acción se inserta en un escenario donde el debate sobre la inmigración alcanza niveles de tensión significativos, especialmente en ciudades estadounidenses que han enfrentado desafíos continuos por más de un año debido a la llegada creciente de migrantes.

La acción legal, que coloca a Chicago en el centro de un litigio, surge en un momento donde la política de inmigración federal está bajo escrutinio constante, generando un amplio debate sobre las condiciones y derechos de los solicitantes de asilo.

Desde el año 2022, el estado de Texas ha tomado la iniciativa de enviar a más de 100,000 migrantes a diversas ciudades consideradas santuarios y gobernadas por líderes del partido demócrata. 

Esta decisión sigue a un incremento notable en el número de migrantes que han cruzado la frontera sur en años recientes. Para facilitar este traslado, Texas ha establecido acuerdos con varias compañías de autobuses y ha extendido sus esfuerzos al transporte aéreo.

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El gobernador de Texas, Greg Abbott, ha justificado estas medidas como un intento de aliviar la presión sobre las ciudades fronterizas de su estado. Además, ha enfatizado la necesidad de una reforma en el sistema de inmigración por parte del gobierno federal. 

Según Abbott, los migrantes tienen la libertad de elegir sus destinos finales y reciben boletos sin costo, instando a las ciudades receptoras a cumplir con su compromiso de acogida.

No obstante, esta situación ha generado una gran presión sobre ciudades importantes de Estados Unidos como Chicago, Nueva York y Denver, reportó AP

Los alcaldes de estas ciudades han expresado su necesidad de apoyo adicional, criticando la estrategia de Abbott por considerarla inhumana. Han señalado que los autobuses llegan en horarios impredecibles, sin coordinación ni información previa sobre los pasajeros, lo que complica la atención a personas que ya han enfrentado trayectos largos y peligrosos para llegar al país. 

Además, se ha destacado que muchos migrantes, en su mayoría de Venezuela, han llegado a enfrentarse a condiciones climáticas extremas sin la vestimenta adecuada.

El alcalde de Chicago, Brandon Johnson, ha expresado su preocupación por el caos generado en el último año y medio debido a esta situación. Por su parte, el alcalde de Nueva York, Eric Adams, ha viajado a países latinoamericanos en un esfuerzo por desalentar el viaje de migrantes, mientras Johnson ha enviado delegaciones a ciudades fronterizas buscando mejorar la comunicación.

Detalles de la Demanda

La demanda interpuesta por Wynne Transportation, empresa con sede en Irving, Texas, contra la ciudad de Chicago fue presentada a principios de enero. Aunque inicialmente no atrajo mucha atención, recientemente ha ganado relevancia tras cobertura de medios locales. Wynne Transportation fue contratada por el gobierno de Abbott para el traslado de migrantes.

Chicago, por su parte, ha respondido a lo que ha denominado como prácticas de "autobuses sin escrúpulos", estableciendo normativas que obligan a estos servicios a operar en horarios específicos y en una zona designada en el centro de la ciudad. Estas medidas han llevado a que los subcontratistas de Wynne enfrenten más de 90 demandas por parte de Chicago, con posibles multas que varían entre 2,000 y 10,000 dólares.

Michael Kozlowski, abogado representante de Wynne, ha indicado que estas regulaciones representan una carga significativa y una intimidación para los subcontratistas, que suelen ser operadores de menor tamaño.

La demanda, presentada el 5 de enero, argumenta que la ciudad de Chicago ha excedido su autoridad al regular la inmigración y el comercio interestatal, y que estas acciones violan el derecho al trato equitativo y el debido proceso tanto de la compañía como de los migrantes a bordo de los autobuses. Kozlowski afirma que las regulaciones impuestas son desproporcionadamente gravosas para los operadores de autobuses de fuera del estado en comparación con aquellos asentados en Illinois.

La empresa sostiene que la ciudad de Chicago está implementando un decreto que discrimina contra las compañías de transporte que trasladan migrantes desde la frontera sur, infringiendo los derechos constitucionales de los demandantes. 

La demanda también hace hincapié en los derechos de los pasajeros, acusando a Chicago de actuar de manera discriminatoria contra los migrantes al regular a los operadores de autobuses. Sin embargo, ningún solicitante de asilo figura como demandante junto con Wynne Transportation en esta acción legal.

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