Según Medicina Legal, las lesiones por las que murió Javier Ordóñez "no pudieron ser autoinfligidas, sino producidas por terceros”

Tras conocerse el dictamen de Medicina Legal sobre la muerte de Javier Ordóñez, el Francisco José Calle, forense encargado de los resultados expresó que al estudiante de derecho se le “infringió una energía cinética fuerte y suficiente lesiva para producir daños”, haciendo referencia a los ocho golpes que se encontraron en el cuerpo del hombre.

De esta formas, las lesiones fueron producidas en la zona abdominal, cerca del ombligo, debajo de la costilla, en la espalda y en la región lumbar, según el experto “estamos hablando de múltiples traumas contundentes que por su naturaleza no pudieron ser autoinfligidas, sino producidas por terceros”.

Además, el análisis forense determinó que tuvo hemorragias internas de aproximadamente tres litros y medio se sangre, principalmente en la cavidad abdominal.

Se confirmó que el organismo de la víctima presentaba grado tres de alcoholemia. Sin embargo, el forense manifestó que no se puede relacionar directamente este examen con el comportamiento de Ordóñez.