Mediante la resolución 223 se modificó la resolución 666 de 2020, en la cual se adoptó el protocolo general de bioseguridad para prevenir el contagio del Covid-19.
En la actualización de estos protocolos, el uso de tapabocas sigue siendo obligatorio, sin embargo, se eliminaron del protocolo prácticas como los tapetes desinfectantes y la toma de temperatura.