Marisol Rosas Ramos es médico egresada de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla. Además es especialista en cirugía plástica, estética y reconstructiva. Un título que obtuvo con el número de certificación 1509 expedido el 14 de febrero de 2009, según el Consejo Mexicano de Cirugía Plástica.
Una certificación que le permite realizar su labor hasta 2024. Fue autenticada como miembro activo de la Asociación Mexicana de Cirugía Plástica (AMCPER) de ese país bajo la cédula de especialista 6249824.
Su trabajo como experta en estética y reconstructiva lo realiza en el Hospital Ángeles de Lindavista. Su consultorio es el 510 y está ubicado en Rio Bamba 639 Col Lindavista, 07760 México. Hasta ese lugar han llegado miles de mujeres con la esperanza de tener un cambio físico. Sin embargo, en diversos casos, la experiencia ha sido traumática e incluso fatal.
Rosas Ramos, es una cirujana plástica reconocida y muy famosa en redes sociales por su particular estilo de comunicar. Solamente en Tik Tok tiene más de un millón de seguidores y supera los 24 millones de me gusta. Sus videos publicados hacen referencia a consejos para las personas que quieren operarse, alertas sobre productos, expectativas y resultados de sus pacientes. Pero también a pullas hacia las personas que critican su trabajo.
Como sucede en Colombia, Argentina o Brasil, entre otros países de Latinoamérica, donde practicarse cirugías estéticas sigue estando a la orden del día y es una actividad que crece por la sinergia entre pacientes apurados por un cambio de apariencia y una oferta creciente de cirujanos en el contexto de un negocio millonario con rivalidades entre agremiaciones médicas, México no es la excepción.
Y es que la doctora Rosas Ramos tiene quejas por mala praxis. En Facebook por ejemplo, se ha denunciado y cuestionado su profesionalismo. Así mismo, se alerta a mujeres que piensan realizarse procedimientos estéticos con la facultativa. La Agencia de Periodismo Investigativo, API se adentró en el tema y recopiló las denuncias en su contra.
Según la revista de la Comisión Nacional de Arbitraje Médico de México (Conamed) el médico debe informar al paciente y familiar sobre el estado del paciente, su manejo y posibles complicaciones que se pueden presentar y si cuenta o no con la especialidad para llevar a cabo su estudio y tratamiento.
“Además de prever que en la unidad médica se cuente con los recursos humanos y la infraestructura para el manejo de complicaciones que aseguren una atención óptima”; no obstante, los casos de denuncia contra la doctora son inquietantes.
Karina Calfer es una comunicóloga y periodista mexicana. Creó grupos en redes sociales donde asesora y da a conocer testimonios de personas que se han realizado o piensan en procedimientos estéticos. Su objetivo de trabajo lo define como: “Asesoría de cirugía plástica segura”. En su momento entrevistó a la doctora Rosas, quien le agradeció su labor y felicitó por dar a conocer el tema estético mediáticamente.
Pero la buena relación que se evidenció en el video cambió cuando se hicieron visibles las denuncias de mala praxis de la especialista. Las redes sociales sirvieron para conocer casos que advierten desde descuido de la doctora hacia los pacientes, hasta denuncias en los estrados y muertes.
Aunque esta Agencia intentó hablar directamente con las afectadas, ellas manifestaron no dar más información de la ya publicada. Expresaron tener miedo por verse afectado el proceso y sufrir intimidaciones. Mientras tanto, anunciaron que las demandas están en marcha y se está a la espera de una decisión de la justicia.
Una de las denunciantes dio a conocer que se realizó una operación el 12 de junio de 2020. Se trató de una abdominoplastia y lipotransferencia que le costó 90.000 pesos mexicanos, alrededor de 17 millones de pesos colombianos. Pero más allá de lo estético, la paciente expresó que la cirugía la llevó a “días muy difíciles, de tanto dolor y verme sin poder pararme sola y ensangrentada”.
La mujer del primer testimonio manifestó que su salud empeoró y tuvo que iniciar tratamiento con diferentes especialistas mientras se conocía con certeza su diagnóstico. Pues según ella, la doctora Marisol Rosas mintió y omitió información sobre su cirugía. “Ella jura que nunca le había pasado esto con nadie, que mi caso era único, que no sabía lo que me pasaba, que era mi cuerpo”, manifestó.
Así mismo y junto a otras denunciantes, manifiestó que le cancelaron citas en repetidas ocasiones y las hicieron esperar hasta cinco horas. A la denuncia se le agrega que no se entregaron resultados a tiempo, recibieron malos tratos y la doctora mintió sobre muertes en el quirófano.
Entre los hechos más difíciles de la denuncia se destaca que esta paciente presentaba heridas en la sutura de la herida de abdominoplastia. En dos ocasiones fue suturada sin anestesia y en otro momento, argumentó que la doctora le “arrancó la faja en la primera cita y mi piel de mis costados se fue con la faja”.
Luego de evidenciar que desde el primer día salió mal del procedimiento, relató que gritaba del dolor y desesperación, lo que tenía como respuesta “que era una chillona y exagerada”. Así, las cosas avanzaron y para entonces no aguantaba el dolor de la nalga ni la pierna, pero la doctora aseguraba que era normal.
Varias citas después la situación continuaba y “no podía caminar ni sentarme, si llegaba en silla de ruedas se enojaba más y decía que no exagerara”. Todo derivó en una trombosis que pasó a un eritema y una bacteria que, según la doctora, había conseguido en el lugar donde le realizaron la sutura de la herida tras el procedimiento.
Aunque la mujer acepta su responsabilidad por no elegir bien y se arrepiente, expresó que da a conocer su caso para que las personas busquen bien la información sobre estos médicos. “Que sea "famoso y certificado y caro" no da garantía de nada”, finalizó su relato.
Tres meses después, la afectada dio a conocer que la herida de la abdominoplastia iba mejor, pero la lesión de la pierna sufrió inflamación del nervio ciático, trombosis y hasta úlceras que no fueron tratados a tiempo, “por la negligencia de la doctora de no atenderme, por darme diagnósticos falsos para tapar sus errores, aun sabiendo que hay más chicas como yo con este mismo problema”.
Y apareció otra denuncia. La mujer, que se suma a las presuntas víctimas de la doctora Rosas, expresó que hace un año se realizó una liposucción 360, es decir completa. Al terminar la cirugía, se descompensó, presentó quemaduras, cicatrices y manchas en las piernas. Según la doctora todo era normal y se trataba de las fajas. Pero luego de tres meses la especialista le dijo que quedó con grasa en el abdomen alto.
“De hecho no tenía cintura ni pompa, no parecía que me hubieran operado”, dijo la afectada. Entonces, la solución: otra cirugía para quitar la grasa y solo se le cobraría la anestesia y el quirófano. Pese a ello, luego de estudios preoperatorios y otros eventos, ocho meses después la doctora le dijo que le cobraría lo de una ‘lipo’.
Tres horas después del “supuesto retoque”, a la mujer le apareció una bola alrededor del ombligo, según la doctora una situación normal. Para el masajista de la operada: la especialista no la extrajo con una jeringa. Entonces, en la consulta durante el posoperatorio, efectivamente se consideró de una grasa que se sacaría sin ningún costo y en su consultorio con anestesia local.
Según las pruebas sobre este caso, la mujer fue agendada para el 2 de diciembre, pero le cancelaron más de diez veces la cita, incluso en un caso con tres horas antes de realizar el procedimiento. Y así, de nuevo un consejo para las mujeres: “La intención del post es que de verdad investiguen con varios cirujanos antes de hacerse cualquier procedimiento”.
Denuncias que van más allá de malos tratos, insultos, mala praxis e incumplimientos. Pues una de las publicaciones resalta; “¡Dra. Marisol Rosas Ramos es una asesina!!”. Y se trata del caso de una joven de 22 años que murió “desgraciadamente (porque) nosotros no teníamos idea de que esta mujer es una carnicera, que mata a sus pacientes, y no les importa su vida”.
La persona que pone en evidencia el fatal desenlace manifestó que la especialista no es profesional y da a conocer el caso para “ayudar a salvar la vida de alguien”. Así mismo y como las otras denuncias, recalca la necesidad de no creer en lo que se ve en internet.
Sobre este caso se conoce que era una joven en óptimas condiciones, no se encontraba enferma y hacía ejercicio. Según el hermano de la víctima, ella llevaba una vida muy saludable y “esa doctora dañó sus órganos vitales y desde que salió de la cirugía nunca se preocupó por su vida”. Luego de la intervención, la llevaron a otro hospital, pero “a pesar de que aguantó lo más que pudo, ella falleció al día siguiente, solo tenía 22 años”.
Pero, además, el hermano de la víctima mortal afirmó: “el video de mi hermana sigue en el canal de YouTube de la persona que le arrebató su vida como forma de publicidad”. En la publicación del caso se conoció que el antes y después de la operación fue publicado como un caso exitoso en las redes de la doctora a pesar de la muerte.
“Se supone que la ética profesional envuelve poner la vida del paciente como prioridad, cosa que no sucedió. Se supone que alguien profesional asesora orienta usando sus conocimientos para optimizar el éxito y la seguridad del paciente. La gente deposita toda su confianza en gente ambiciosa y sin rangos de humanidad que solo ve el dinero que pueden sacar de las personas”, argumentó la madre de la mujer que falleció tras la cirugía.
Otro de los casos fatales frente a la actividad profesional de Marisol Rosas se soportó con extensa documentación. Se trata de una mujer que afirmó tener una demanda en proceso contra la especialista. La denuncia presenta sellos de Conamed y la Procuraduría. Fue interpuesta por la hija de una víctima quien asegura que falleció en el quirófano luego de que la doctora le dijera “usted ni se preocupe”.
Ante las diferentes denuncias contra la doctora Rosas, Karina Calfer comenzó a recibir llamadas de la profesional manifestando que era mentira lo que se decía en los grupos que lideraba en redes sociales. Incluso expresó que estaba recibiendo amenazas, pero todo en medio, según Karina, de una presión para eliminar el contenido en contra de la especialista.
Adicionalmente, la creadora de contenido denunció que la doctora publicó la página donde se denuncian los casos y dio su número de contacto a las personas que apoyan su trabajo, situación que ha llevado a un acoso contra Calfer.
Rosas Ramos era una de las doctoras más solicitadas y preguntadas en los blogs de Karina, pero frente a las denuncias, comenzaron a salir a la luz más casos en contra de la especialista, así como denuncias y elementos de prueba para demostrar su responsabilidad en la muerte de pacientes y sufrimiento de otras mujeres.
@drarosasplastics Ante los comentarios que me descalifican exijan elementos objetivos que los respalden y que estos no sólo sean “supuestos testimonios”
♬ sonido original - drarosasplastics
De igual forma, se dieron a conocer los recibos de pago de las cirugías que demuestran que las afectadas fueron atendidas por la doctora Rosas. Las mujeres se han unido a denunciar la mala praxis de la cirujana, quien por el contrario se ha dedicado a responder a las denuncias por medio de redes sociales. La Agencia de Periodismo Investigativo, API, no recibió respuesta de la facultativa frente a las denuncias en su contra.
Incluso, la doctora tiene tal alcance mediático que ofreció una cirugía totalmente gratis a una paciente. Se trata de una mujer española que respondió, por medio de las redes, que rechazó la oferta porque recibió cientos de mensajes donde se le realizaban sugerencias de no realizarse el procedimiento. “A buen entendedor, pocas palabras bastan”, finalizó.
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